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Las vocales




Ambito de experiencia de aprendizaje: Comunicación
Nucleo de aprendizaje: Lenguaje Verbal y Artistico
Aprendizajes esperados : Segundo ciclo

Trabalenguas Entretenidos

Pablito clavó un clavito.
¿Qué clavito clavó Pablito?

Como poco coco como, poco coco compro.

Erre con erre, guitarra;
erre con erre, carril:
rápido ruedan los carros,
rápido el ferrocarril.

Mariana Magaña
desenmarañará mañana
la maraña que enmarañara
Mariana Mañara

La gallina cenicienta en el cenicero está,
el que la desencenice buen desencenizador será

El perro en el barro, rabiando rabea: su rabo se embarra
cuando el barro barre,y el barro a arrobas le arrebosa el rabo.

Tres grandes tigres tragones tragan trigo y se atragantan. Me trajo Tajo tres trajes, tres trajes me trajo Tajo.

El hipopótamo Hipo
está con hipo.
¿Quién le quita el hipo
al hipopótamo Hipo?

Había una caracatrepa
con tres caracatrepitos.
Cuando la caracatrepa trepa,
trepan los tres caracatrepitos.

Pepe Pecas pica papas con un pico.
Con un pico pica papas Pepe Pecas.

El trapero tapa con trapos la tripa del potro.

Pedro Pérez Pita pintor perpetuo
pinta paisajes por poco precio
para poder partir
pronto para Paris.

El perro de San Roque no tiene rabo
porque Ramón Ramírez se lo ha robado.
Y al perro de Ramón Ramírez ¿quién el rabo le ha robado?

El que compra pocas capas
pocas capas paga
como yo compré pocas capas pocas capas pago.

María Chuchena su choza techaba,
y un techador que por allá pasaba,
le dijo:
-Chuchena,
¿tú techas tu choza, o techas la ajena?

Pepe Peña pela papa,
pica piña, pita un pito,
pica piña,
pela papa,
Pepe Peña.

Ambito de aprendizaje: Comunicación
Nucleo de aprendizaje: Lenguaje Verbal
Aprendizaje esperado: Segundo Ciclo

Los numeros



Ambito de experiencia de aprendizaje: Relación con el medio cultural y social
Nucleo de aprendizaje: Relacion logico matematica y cuantificación
Aprendizajes esperados : Primer ciclo

Para colorear






























































Ambito de experiencia de aprendizaje: Comunicación
Nucleo de aprendizaje: Lenguaje Artistico
Aprendizajes esperados : Primer ciclo

El Ratoncito Perez


Pepito Pérez era un pequeño ratoncito de ciudad. Vivía con su familia en un agujerito de la pared de un edificio. El agujero no era muy grande pero era muy cómodo, y allí no les faltaba la comida. Vivían junto a una panadería, por las noches él y su padre iban a coger harina y todo lo que encontraban para comer. Un día Pepito escuchó un gran alboroto en el piso de arriba. Y como ratón curioso que era trepó y trepó por las cañerías hasta llegar a la primera planta. Allí vió un montón de aparatos, sillones, flores, cuadros..., parecía que alguien se iba a instalar allí.

Al día siguiente Pepito volvió a subir a ver qué era todo aquello, y descubrió algo que le gustó muchísimo. En el piso de arriba habían puesto una clínica dental. A partir de entonces todos los días subía a mirar todo lo que hacía el doctor José Mª. Miraba y aprendía, volvía a mirar y apuntaba todo lo que podía en una pequeña libreta de cartón. Después practicaba con su familia lo que sabía. A su madre le limpió muy bien los dientes, a su hermanita le curó un dolor de muelas con un poquito de medicina... Y así fue como el ratoncito Pérez se fue haciendo famoso. Venían ratones de todas partes para que los curara. Ratones de campo con una bolsita llena de comida para él, ratones de ciudad con sombrero y bastón, ratones pequeños, grandes, gordos, flacos... Todos querían que el ratoncito Pérez les arreglara la boca.

Pero entonces empezaron a venir ratones ancianos con un problema más grande. No tenían dientes y querían comer turrón, nueces, almendras, y todo lo que no podían comer desde que eran jóvenes. El ratoncito Pérez pensó y pensó cómo podía ayudar a estos ratones que confiaban en él. Y, como casi siempre que tenía una duda, subió a la clínica dental a mirar. Allí vió cómo el doctor José Mª le ponía unos dientes estupendos a un anciano. Esos dientes no eran de personas, los hacían en una gran fábrica para los dentistas. Pero esos dientes, eran enormes y no le servían a él para nada. Entonces, cuando ya se iba a ir a su casa sin encontrar la solución, apareció en la clínica un niño con su mamá. El niño quería que el doctor le quitara un diente de leche para que le saliera rápido el diente fuerte y grande. El doctor se lo quitó y se lo dió de recuerdo. El ratoncito Pérez encontró la solución: "Iré a la casa de ese niño y le compraré el diente", pensó. Lo siguió por toda la ciudad y cuando por fin llegó a la casa, se encontró con un enorme gato y no pudo entrar. El ratoncito Pérez se esperó a que todos se durmieran y entonces entró a la habitación del niño. El niño se había dormido mirando y mirando su diente, y lo había puesto debajo de su almohada. Al pobre ratoncito Pérez le costó mucho encontrar el diente, pero al fin lo encontró y le dejó al niño un bonito regalo.

A la mañana siguiente el niño vió el regalo y se puso contentísimo y se lo contó a todos sus amigos del colegio. Y a partir de ese día, todos los niños dejan sus dientes de leche debajo de la almohada. Y el ratoncito Pérez los recoge y les deja a cambio un bonito regalo. Y colorín colorado este cuento se ha acabado.
FIN


Ambito de aprendizaje: Comunicación
Nucleo de aprendizaje: Lenguaje Verbal
Aprendizaje esperado: Segundo Ciclo
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